Por Michael Bloch
El 29 de septiembre se presentó el informe de Goldstone en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra. La misión, encabezada por el juez sudafricano Richard Goldstone, fue nombrada para investigar posibles violaciónes del derecho internacional cometidas por ambos bandos durante la guerra en Gaza (Diciembre2008-Enero 2009). La reunión, sin embargo, rápidamente fue aplazada después de una solicitud sorpresiva de la delegación palestina. Esta decisión ha enfurecido a muchos palestinos y por supuesto… al Hamás.
En efecto, tras las críticas recibidas por la delegación palestina, el Presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas (foto), ha decidido dar marcha atrás.
Este miércoles 7 de octubre, el representante de Libia, con el apoyo tácito de las autoridades palestinas, remitió el informe al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, a pesar de la intención inicial de Mahmoud Abbas de apoyar el aplazamiento en el trato del informe Goldstone para marzo del 2010.
Por presión amistosa de los EE.UU., se le había explicado a los palestinos que si lo que se quería era revivir el proceso de paz, no era una buena idea atacar a Israel en una organización internacional ya que no era una buena forma de mostrar su buena voluntad, le explicaron a las autoridades de los EE.UU..
Para conseguir la aprobación de su pueblo, Abbas, (¡vaya sorpresa!) ha decidido rápidamente adoptar otra línea de defensa. Por lo tanto, aseguró ahora que había pedido el aplazamiento por el bien del país. Abbas dijo que necesitaba más tiempo para que los dirigentes palestinos puedan convencer a otros países de la necesidad de apoyar este informe.
En tanto, las manifestaciones en contra de Abbas se han multiplicado en los territorios palestinos.
Los palestinos no se han dejado engañar por la maniobra política del jefe de Fatah. Este lunes 5 de octubre, cientos de residentes de Ramallah han protestado contra lo que consideran "un insulto al pueblo palestino". El miércoles, una ceremonia en donde lanzaban zapatos contra la foto de Abbas se organizó en la Franja de Gaza, una zona bajo el estricto control del Hamas. Un póster del presidente palestino Mahmoud Abbas fue borrado con una X roja mientras los habitantes lanzaban sus zapatos.
En su propio partido, Al Fatah, Abbas también ha sufrido fuertes críticas. "Lo que sucedió fue un error pero que puede ser reparado", dijo el secretario general de la OLP (Organización para la Liberación de Palestina). "Tenemos el coraje de admitir que es un error" , dijo el líder palestino.
Balad, un partido árabe israelí con representación en la Knesset, que, en general critica las opciones políticas de la Autoridad Palestina, calificó la decisión de Mahmoud Abbas de "delito político".
Ante estas series de protestas, Mahmoud Abbas, ha decidido apoyar las opiniones de los extremistas de su partido. Según explicó (6 de octubre) el jefe negociador palestino, Saeb Erekat, Abbas había cambiado de opinión y consideraría "pedir que el bloque árabe e islámico represente oficialmente el informe Goldstone" en diferentes instituciones internacionales de las Naciones Unidas.
Esto fue lo que sucedió ya que al otro día, Trípoli presentó oficialmente una petición en nombre del grupo árabe en la ONU. El presidente palestino, Mahmoud Abbas, se ha apresurado a acoger favorablemente esta iniciativa: "El enfoque de Libia es apoyado por los derechos y los representantes palestinos", proclamó.
El representante de Vietnam, el embajador Le Luong Minh, que es el actual Presidente del Consejo, anunció este miércoles 7 de octubre que había aceptado que se lleven a cabo debates en la sesión especial privada.
Sin embargo, es poco probable que esta reunión culmine con una resolución contra Israel. El Departamento de Estado había pedido, el 29 de septiembre, rechazar la política de "doble rasero", que guía este informe.
Los Estados Unidos, al igual que los otros cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad, con poder de veto, se opondrían a cualquier resolución de condena violenta contra el Estado hebreo.