Por Rabino Iona Blickstein
Grave es el castigo de la hija de un Cohen, un sacerdote, que se prostituyó comparado con la hija de un simple miembro de Israel.
¿Por qué la Tora es tan severa con la hija del Cohen dedicándole un párrafo especial? La razon es la misma por la cual la Tora, le dedica secciones especiales a los Cohanim, los sacerdotes, por su origen, su hogar, su nivel y por la relacion especial que le fija la escritura, la cuál la coloca en un nivel más alto que a las otras hijas de Israel, por todo eso se le exige más.
La Tora lo pone claro: “deshonra a su padre”, no profana solo al sacerdocio en sí. La hija del Cohen se educó en una “casa santa”, sus pensamientos deberían ser de acuerdo a su entorno, alejarse del pecado, mas que las otras hijas de Israel, por eso su castigo es mayor. Los “cohanim”, los sacerdotes son una tribu especial, comenzando desde el momento que dijeron “sí” al llamado de Moshe, nuestro Maestro, cuando exclamó “¡quien este con D-s, que venga a mi!”, en el triste episodio del “becerro de oro”, hasta la generación de los Hasmoneos, que con su total entrega salvaron a la Tora del olvido.
La tribu de Levy, es la que enseña Tora al pueblo, así cita el profeta Malaji, “Porque los labios del sacerdote han de guardar la ciencia, y de su boca (los hombres) deben buscar la Ley porque mensajero es del Señor de los ejércitos” (2:7). En el centro de la tribu estan los sacerdotes, quienes guardaron cumplir su especial misión, no pecaron en el “becerro de oro”, eran más cuidadosos y consagrados que los otros hijos de la tribu de Levy. En varias fuentes los cohanim son considerados ágiles y rápidos al cumplir la orden divina, eran cuidadosos y prontos al comer los “kodashim”, las ofrendas consagradas, al comer la “teruma”, la ofrenda especial, siempre rápidos para presentarse en el Templo. ¿Quién recibirá castigo mayor?
No es igual una persona simple que peca a la persona con educación y de buena familia. El primero no tuvo de quien aprender, no tuvo en sus padres un ejemplo positivo a quien emular, el segundo creció en un entorno donde reinaban valores positivos y ejemplos vivientes a los cuales tenia solamente que seguir.
Un padre o abuelo de alto nivel espiritual pueden agravar el castigo del hijo o nieto, pero tambien pueden salvarlo en su caída tras sus malos instintos e inclinaciones, un ejemplo lo encontramos en el comportamiento de Iosef frente a los intentos de seduccion de Zlija, la esposa del ministro egipcio, como cita el Talmud “En ese momento le apareció la imagen de su padre” (Tratado de Sota, 37).