Por Jorge Marirrodriga
Muy cultos, pero muy antisemitas. Hay que ver cómo están la cultura y la educación. Resulta que en París desde el lunes están reunidos los representantes de varios países para elegir al que será el director de la UNESCO, ya saben, el organismo de Naciones Unidas para la Cultura y la Educación, que no sé muy bien para qué sirve, aunque deduzco que sus funcionarios no pasan apuros para llegar a fin de mes. Y todo sufragado generosamente por nuestros bolsillos.
Bueno, pues el candidato favorito es Farouk Hosni, un egipcio que anteriormente fue ministro de cultura de su país y cuya elección supondría un hito, ya que se será la primera vez en que un musulmán presida tan prestigioso organismo. Pues muy bien. Multiculturalidad, buen rollito y una buena noticia para Egipto. Sólo hay un pequeño detalle y es que el señor Hosni, a quien se considera muy culto, ha declarado cosas como que habría que quemar todos los libros israelíes que pueda haber en la nueva biblioteca de Alejandría (y que lo haría él en persona), que la cultura israelí es “inhumana” y que existe una “infiltración judía” en los medios de comunicación internacionales. Honestamente, no sé que prensa lee este señor. O sea, Farouk Hosni es un antisemita como un piano. Y aún así está entre los finalistas al puesto. Tócate los cojones Tarzán.
Si sale elegido al menos sabremos desde el primer momento de qué pie cojea. Algunos de sus predecesores en el cargo se lo han tenido bien callado mientras ganaban un sueldazo y viajaban en primera clase. Sin ir más lejos el español Federico Mayor Zaragoza quien ahora no hace más que ir declarando a diestro y siniestro que Israel es un estado genocida y se manifiesta a favor de Hamás (veáse video). Otro antisemita muy culto.
Jizballah: toma el dinero y corre
Mientras ayer nos referíamos al buen ejemplo que dan los líderes de Hamás a los suyos hoy nos vamos a centrar en los otros asalariados de Teherán en la zona. Los muchachos de Jizballah. Resulta que estos pollos que tienen tomado como rehén un país para atacar Israel y expandir el terrorismo internacional tampoco predican con el ejemplo las teorías con las que lavan el cerebro a sus seguidores.
Resulta que cuatro de sus máximos dirigentes han perdido un dineral a manos de un listillo al que ya se conoce como “el Madoff de Jizballah” y que yo supongo que a estas horas debe estar tratando de camuflarse entre los bosquimanos. Los estafados, entre los que se encuentra el jefe de Comité de Coordinación de la organización, Wafiq Safa, y el jefe de Hizbullah en el Parlamento libanés, Mohamed Raad, han caído en el típico timo piramidal. Les prometían un interés de entre el 25% y el 55% y los tíos venga a meter guita, la suya y la que no lo era. Y claro al final se ha descubierto el pastel. El Madoff de Jizballah ha estafado en total unos 1.600 millones de dólares y de él se dice lo de siempre “parecía un hombre muy religioso que dedicaba dinero a obras de caridad”.
Y yo me pregunto. ¿Pero el Islam no prohibía los préstamos y no digamos la usura? ¿Y como se llama prestar el dinero al 55%? ¿Caridad? ¿Y cómo viven los palestinos en Líbano mientras los jefazos de Hizbullah hacen de todo por engordar sus cuentas corrientes? ¿Y estos luchan por la libertad? Por la de sus bolsillos, desde luego.
No sin mi hermano (el de Hamás)
Si es que al final las cosas son lo que son. Una banda de mafiosos es una banda de mafiosos aqui, en Calabria y en la China… y en Gaza también, por mucho que el mundo mediático europeo se empeñe en presentarlos ante la opinón pública como desinteresados luchadores por la libertad.
Los jefes de Hamás, esos que ordenan poner a los niños de otros en primera fila para que a ser posible les peguen un tiro, esos que animan a los otros a quitarse la vida en nombre de la causa mientras ellos disfrutan sin freno de los placeres de este mundo, esos que se esconden en los sotanos de los hospitales cuando empiezan a caer las bombas pero ordenan utilizar los colegios como bases de lanzamiento de cohetes… esos mismos se ponen histéricos cuando se les pide a ellos el sacrificio.
Resulta que hay una trifulca de aqui te espero en el interior de la cúpula de Hamás porque uno de sus comandantes militares, Muhamad Sinwar, se ha puesto como una pantera al saber que en la lista de presos para intercambiar por Gilad Shalit no se encuentra su hermano, Yahya Sinwar, detenido en una cárcel israelí por matar israelíes. Muhamad Sinwar manda sin pestañear a la muerte a mucha gente: A sus propios subordinados, a los civiles que utiliza como escudos humanos y, por supuesto, a cuanto israelí puede. Todas estas muertes están justificadas naturalmente porque es un precio que hay que pagar, pero el que su hermano siga en la cárcel de ninguna manera, Hasta ahí podíamos llegar. Y en un acto que califica por sí mismo al tipejo ha amenazado con hacer daño… ¿a quienes se oponen a incluir a su hermano en la lista? No señor, a Gilad Shalit. Lo único que me pregunto es si tendrá el valor de hacerlo por sí mismo o enviará a alguien que haga el trabajo por él.
Por cierto, que se le ha ofrecido la oportunidad de que el hermanísimo salga de la cárcel pero sea deportado a un tercer país como Siria, pero a Sinwar le parece poco. Lo quiere en Gaza con mamá, papá y el resto de la familia.
¿Y a esta gentuza es a la que estamos dando bola en los medios europeos?
Fuente: Guysen News