Hillo Ostfeld recibió el Premio al Mérito Comunitario 2013 el pasado 3 de noviembre en la Sinagoga Tiferet Israel del Este-Los Palos Grandes. Este galardón es el reconocimiento que la Asociación Israelita de Venezuela otorga, desde 1990, a aquellas personas de la Comunidad Judía de Venezuela que a lo largo del tiempo, y de una forma constante, se hayan distinguido por su trabajo sobresaliente dentro de la kehilá.
La Asociación Israelita de Venezuela reconoció la dilatada y destacada actividad, de Ostfeld, en pro de la Comunidad Judía de Venezuela; así como que en el desempeño de sus cargos ha propiciado el entendimiento entre la Unión Israelita de Caracas y la Asociación Israelita de Venezuela; su apoyo irrestricto al Estado de Israel; y su proceder y vocación comunitaria, calificándolos como ejemplos a seguir por las actuales y futuras generaciones.
El comité creado para la selección del Premio al Mérito Comitario 2013-5774 estuvo conformado por Salomón CohénBotbol, David Gabay Levy, Abraham Levy Benshimol, Alberto MoryusefFereres y Joel Cohen Waxsmann.
Al evento asistieron representantes de las distintas instituciones comunitarias. También contó con la presencia del embajador de Rumania, Emil Ghitulescu; y el de Alemania, Walter Lindner; así como con la de los embajadores Milos Alcalay y Julio Cesar Pineda.
Luego de un breve recorrido por la vida de HilloOstfeld, el embajador de Rumania tomó la palabra agradeciendo la invitación a la “ceremonia para elogiar a este líder de valor internacional” y agradecerle, al galardonado, su dedicación a las comunidades. También recordó los reconocimientos que su país le ha entregado a Ostfeld.
Salomón CohénBotbol, presidente de la Asociación Israelita de Venezuela, comentó que “muchas comunidades desearían tener una integración judía, una unión entre ashkenazím y sefaradím como la nuestra, una organización comunitaria como la venezolana, con la conceptualización de justicia como la que vivimos en esta kehilá. Esta comunidad se hizo verdad y se sigue ejecutando, gracias a líderes visionarios de la talla de HilloOstfel, que supieron soñar con esta realidad, y que dieron los pasos necesarios para que se cumpliera ese sueño”.
Cohen Botbol propuso al SEC abrir un espacio académico para que los jóvenes escuchen, de los propios líderes comunitarios de la talla del homenajeado, “cómo logramos tener esta bella comunidad, qué obstáculos se tuvieron que vencer, cómo se logró que no fuera una crisis familiar los matrimonios entre sefaradím y ashkenazím, cómo un grupo de dirigentes de la UIC aceptó la propuesta de la AIV de convertir al colegio Moral y Luces en un solo colegio para toda la comunidad, cómo se hizo Hebraica, cómo el Nuevo Mundo Israelita fundado por Moisés Sananes miembro de la AIV pasó a ser el periódico comunitarios. Que nuestro nietos sepan que esto que tenemos no es Maná caído del cielo, esto se pensó, se creó, se discutió, se implementó y se mantiene, gracias a líderes con una visión creativa y futurista como Hillo Ostfeld”.
Durante su intervención el presidente de la AIV recordó un extracto del PirkéAvot: “Si no me ocupo yo de mí, ¿quién se ocupará de mí? Y si tan solo pienso en mí, ¿qué valgo? Y si no lo hago ahora ¿cuándo?”.
El rabino Isaac Cohén, rabino principal de la Asociación Israelita de Venezuela, comentó que Ostfeld “es de esa clase de judíos, benditos sean, que cuando ven a un Ben Israel, ven a un hermano. De esa clase de judíos generosos y entusiastas, que a través de un liderazgo fundamentado en el compromiso y en la solidaridad crearon aquí, en Venezuela, no solamente una comunidad unida y unificada sino además una comunidad única que por su organización integrada e igualitaria, con la participación conjunta de Ashkenazím y sefardím, crearon, como al señor Ostfeld le gusta repetir: ‘La mejor comunidad del mundo’”.
El rabino Cohén aseguró que HilloOstfeld en su vida personal y en su labor comunitaria, “siempre siguió el principio de elegir el amor y no el rechazo. Ese fue precisamente el espíritu de los auténticos pioneros, fundadores del moderno Medinat Israel, quienes a todo Ben Israel, sin importar su origen o procedencia, lo recibieron con los brazos abiertos. Por eso a nadie puede sorprenderle que el señor Ostfeld haya sido desde siempre un convencido y ferviente sionista. Pero la mejor definición que le encaja es la de ser un hombre amable y generoso, que cree en la solidaridad entre los seres humanos y la pone constantemente en práctica de manera gentil y humilde”.
HilloOstfeld nació en Rumania en 1926. Es un empresario y dirigente de la comunidad judía de Venezuela. Sobreviviente de la Shoá. En 1943 se casó con su esposa Klara. El 26 de enero de 1953 llegó a Venezuela.
Durante su intervención Ostfeldaseguró quede todos los honores que ha recibido este es uno que recordará y reconocerá toda su vida. Asimismo, agradeció a la Junta Directiva de la AIV. “Para mí la comunidad, después de mi familia, es lo más importante de mi vida”.
Ostfeld recordó que “este año perdimos a uno de los más grandes sabios del siglo XX y parte del siglo XXI, el gran rabino Obadia Yosef Z´L. Cuando Yosef llegó a Venezuela siendo rabino principal de la comunidad sefaradita, yo le recibí a pesar de ser ahskenazí porque la AIV todavía no tenía los salones, por lo que recuerdo que le hicimos un recibimiento en los salones de la UIC. Antes de irse él me dijo: ‘SeñorHilloOstfed te agradezco muchísimo por todo lo que has hecho por mí, eres un hombre excelente, tienes mis bendiciones para toda tu familia, lo único que siento de verdad es que no seas sefaradita’. Y le respondí: ‘Hoy declaro aquí que desde hoy soy sefaratida también”.
El homenajeado recalcó que es safaradita porque “siento que son mis hermanos y no veo ninguna diferencia. Además soy miembro de la Asociación, esto para mí es un inmenso honor”. También recordó que “todos nacimos igual, el hecho de dar algo a otra persona no es hacer una limosna, es hacer un acto de justicia, porque a uno le sobra y a otro le falta”.
Ostfeld contó sobre su recorrido desde su ciudad natal, su experiencia al finalizar la Shoá y cómo llegó a Caracas. Al llegar a Venezuela estuvo involucrado en las distintas instituciones comunitarias. “Cuando llegué a Venezuela empecé a sentir que soy igual a todos los demás”.
Asimismo destacó que “el ejército ruso me salvó la vida, Israel me devolvió la dignidad humana y Venezuela me devolvió la fe en los seres humanos”.
Por Sara De Santa Clara
Fuente: Prensa AIV