Transcripción del discurso del Embajador del Estado de Israel ante el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ron Prossor, el viernes 18 de julio de 2014 ante el inicio de la incursión terrestre de la Fuerzas de Defensa de Israel en la Franja de Gaza para eliminar infraestructura terrorista de Hamas.
A continuación sus palabras:
Señor Presidente
Frente a terroristas que secuestran a nuestros hijos, no nos quedaba otra salida.
Frente a cohetes que caen como lluvia sobre nuestros ciudadanos, no nos quedaba otra salida.
Frente a jihadistas que perforan túneles debajo de nuestras fronteras.
Hace pocas horas, la Fuerza de Defensa de Israel entró en Gaza para restaurar calma sostenida a la gente de Israel reduciendo a la vez las capacidades de terror de Hamas, Hicimos todo lo que estaba en nutro poder para evitarlo. El Primer Ministro Netanyahu tomó la valiente decisión de aceptar cada cese al fuego ofrecido —incluso cuando la gente en Israel estaba siendo atacada— pero Hamas rechazó todas las aperturas para restaurar la calma.
Eso no era lo que queríamos. Hemos enviado a nuestros jóvenes —a nuestros hijos y a nuestras hijas— a enfrentarse al enemigo que vive bajo la violencia y celebra la muerte. Quiero ser claro —nuestras fuerzas están combatiendo en Gaza, pero no están combatiendo contra el pueblo de Gaza.
Durante años, los ciudadanos de Israel han sido las víctimas de ataques incesantes por un grupo terrorista asesino. Hamas nos ha atacado en nuestros hogares y nuestras escuelas y nuestros cafés y en nuestros autobuses.
Pónganse ahora del lado de Israel para prevenir el bombardeo de cohetes, el próximo secuestro y el próximo ataque suicida para que podamos, de una vez por todas, remover la amenaza de terrorismo que cubre con una sombra oscura al pueblo de Israel.
Señor Presidente,
El mes pasado por si solo hace que vislumbren las amenazas a las que Israel se enfrenta. Hemos sido atacados en nuestros cuatro frentes. Se han lanzado cohetes dese Siria, el Líbano y el Sinaí y más de 1.500 cohetes han sido disparados por terroristas desde Gaza.
A la gran contención de Israel se le ha enfrentado agresión sostenida. Durante seis horas, l lunes, Israel dejó de disparar. Durante ese lapso, el mundo fue testigo de lo que Hamas entiende como cese al fuego —Israel cesa y Hamas dispara. Hamas no disparó uno o dos cohetes, bombardeó a Israel con 50 cohetes. Cada uno envió un ruidoso y claro mensaje —Hamas determinó hacer la guerra contra el Estado judío.
Dos días después, las ONU pidió una tregua humanitaria. Un vez más, el Primer Ministro Netanyahu convino y probó que a Israel no le interesa una guerra. En la medida en que trabajadores asistenciales transfería bienes en ayuda al pueblo de Gaza, Hamas siguió, desafiante, lanzando cohetes hacia Israel-
¿Cómo se vale Hamas del cese al fuego humanitario? Envió a trece terroristas poderosamente armados a través de un túnel del terror hacia el Kibbutz Sufa, con el solo fin de cometer una masacre.
Esta es la tercera vez en las dos últimas semanas que Hamas se ha valido de sus túneles para infiltrarse en Israel y ha intentado llevar a cabo ataques. Y mientras tanto sigue lanzando centenares de cohetes.
Señor Presidente,
Durante 10 días, la vida de cinco millones de israelíes ha significado tener tan solo segundos para correr hacia un refugio de bombas y salvar sus vidas. Nuestra mayores ciudades —Tel Aviv, Haifa y Jerusalén— han sido bombardeadas sobre una base diaria.
No hay país en el mundo que toleraría tal asalto contra sus ciudadanos —y no se puede esperar que Israel lo tolere tampoco. Estamos actuando solamente para defender a los israelíes ante los contantes ataques terroríficos.
Durante la Operación Borde Protector, Israel se ha comprometido a respetar el derecho internacional. Nuestro ejército es un ejército moral como ningún otro en el mundo. No aspira causar daño a ninguna persona inocente. Actuamos sólo contra objetivos terroristas y lamentamos genuinamente cualquier pérdida civil. En contraste, no hay línea roja que Hamas deje de cruzar. No se detendrá ante nada y no hay profundidad en la que dejarán de hundirse —se valen incluso de ambulancias cargadas de niños para mover a sus terroristas a lo largo de Gaza.
No hay lugar fuera de los límites para Hamas —guardan sus armas en viviendas familiares, lanzan cohetes desde mezquitas y fijan sus cuarteles generales en el sótano del hospital de Gaza.
Ayer, la Agencia e las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) admitió que misteriosamente había hallado 20 cohetes en una de sus escuelas. Estoy seguro de que si la UNRWA se toma el cuidado de verificar sus demás instalaciones, descubriría que es solo la punta del iceberg. Hamas está usando las instalaciones de la ONU para emprender un doble crimen de guerra, atacando a civiles mientras se esconden detrás de civiles palestinos.
Desde la seguridad de sus lujosos hoteles en Qatar, los líderes palestinos como Khaled piden servicio en la habitación con una mano y le ordenan a Hamas valerse de los palestinos como escudos humanos con la otra.
Pero no tienen por qué tomar mi palabra para ello, El delegado palestino ante del Consejo de Derechos Humanos la ONU, lo admitió tanto, al decir (y lo cito): “Los cohetes que se están lanzando ahora, todos y cada uno de los cohetes constituyen un crimen de lesa humanidad, ya se que acierten o fallen, porque apuntan a blancos civiles.”
Espero que el delegado palestino recuerde esas palabras al amenazar a ciertas agencias de la ONU.
Señor Presidente,
Israel se ha enfrentado a una decisión que ninguna otra nación debería tomar: abstenerse de responder y someter a sus civiles a fuego de cohetes o enfrentar a los terroristas y correr el riesgo de lesionar a los civiles. Hamas se vale de las víctimas palestinas para energizar su máquina de propaganda. La estrategia de Hamas es clara –perpetúa la matanza de sus propias gentes esperando que la comunidad internacional ejercerá presión sobre Israel para que otorgue sus demandas.
Señor Presidente,
Tristemente, mucha gente ha sido engañada por su campaña cínica que describe a la lucha como el equivalente moral o un (comienzo y fin de la cita) “ciclo de violencia.”
Todos quienes pretenden que hay que culpar a ambas partes le están haciendo el juego a Hamas y están condenando a la gente de Gaza y de Israel a que sigan sufriendo. Las condenas a Israel mal sustentadas tienden a fortalecer a los terroristas.
Hay una clara diferencia entre Israel y Hamas –los judíos creen en el valor de la vida, mientras Hamas cree en el valor de suprimir las vidas.
¿Cuánto palestinos más debe caer como víctimas hasta que el Presidente Abbas rompa su asociación con Hamas? Abbas es el presidente del gobierno unitario que incluye a un grupo terrorista asesino. ¿Para qué, exactamente, está unido ese gobierno? Obviamente, no para la paz.
Señor Presidente,
Incluso cuando suenan las sirenas a lo largo de Israel, algunos miembros de la comunidad internacional están haciendo sonar falsas aquí, en la Naciones Unidas, Nos dijeron que tan pronto como Israel se retirara a las líneas de 1967 y desmantelara sus asentamientos habría paz. Insistieron en que el conflicto era energizado por la así-llamada ocupación.
¿Ocupación? ¿Acaso nadie recuerda?
Cuando yo presidía el Servicio Exterior de Israel en el 2005, Israel le entregó cada pulgada de Gaza a los palestinos. En el proceso, el mundo observó como miles de familias fueron desraizadas de sus hogares y desmantelaron sus negocios.
Cuando terminamos, no había ni un soldado, ni un colono, ni un solo israelí. Todo lo que dejamos atrás fueron invernaderos y otras estructuras que desarrollarían la economía de Gaza y le permitirían al pueblo palestino construir una sociedad pacífica. Abrimos cruces de frontera, fomentamos el comercio porque queríamos que Gaza tuviera éxito. Esperábamos que ello serviría de modelo para que dos sociedades viviera en paz al lado la una de la otra.
Pero no fue así. Hamas se valió de la pretendida democracia para crear un teocracia militante. En primer lugar, desató una guerra civil contra Fatah y ejecutó a los políticos opositores. Luego, destruyó lo invernaderos y los negocios que dejamos atrás utilizándolos para construir instituciones económicas, construyó un régimen terrorista con miles de túneles subterráneos. Y, finalmente, se apoderó del financiamiento de la comunidad internacional para inundar a Gaza con armas.
En todos y cada uno de los meses durante los últimos nueve años, Hamas ha disparado cohetes hacia los pueblos y las ciudades de Israel. A lo largo del tiempo, ha expandido su arsenal de cohetes de unos cientos a miles. Las armas que hoy tienen son más sofisticadas y tienen mayor alcance dentro de Israel que nunca antes.
Cada varios años, Hamas aumenta sus ataques lanzando una ofensiva masiva.
En el 2012, Hamas disparó 800 cohetes que podía alcanzar a 1 millón de israelíes que viven en el área de Gaza.
En el 2008, a lo largo de tres semanas, Hamas ha disparado 800 cohetes que podrían alcanzar a 351 millones de israelíes en el sur y centro de Israel.
Durante las dos últimas semanas, Hamas ha disparado 1.500 cohetes que amenazan a 5 millones de israelíes –o 70% de nuestra población– que viven a lo largo del país.
Después de cada escalada, la comunidad internacional auspicia un cese al fuego e Israel lo acepta esperando que finalmente traerá la paz. Después de tres ruedas de importantes asaltos y más de 12.000 cohetes en nueve años, ha quedado claro que Hamas no está interesado en traer la calma a Gaza. Se está valiendo de la estrategia “Hudna”. Cuando Hamas se halla al borde de la derrota, conviene en un breve receso para descansa, rearmarse, y reasumir la agresión.
Señor Presidente,
Durante años le hablamos de los miles de cohetes que Hamas estaba contrabandeando en Gaza. Se nos respondió con el silencio. Una y otra vez le pedimos a la comunidad internacional que condenara el disparo de cohetes y la respuesta fue el silencio.
Ha llegado la hora de que la comunidad internacional se en frente a las consecuencias de su falta de acción. Hamas usó su punto de apoyo en Gaza para pisotear al pueblo palestino y construir una base de terror en el patio trasero. Y ahora ve una oportunidad de reiterarlo.
Hamas está utilizando al gobierno de unidad para exportar sus capacidades de terrorismo desde Gaza a Judea y Samaria. Si no se detiene a Hamas, ello implicará mayor terror para Israel y meas tragedia para los palestinos.
La comunidad internacional acogió el convenio de unidad entre Fatah y una organización de terror, en la creencia que con ello nos acercaría más la paz. ¿Acaso a ustedes les parece lógico eso?
¿Cómo es que el hecho de acoger a un grupo terrorista cuya razón de ser es la erradicación de Israel puede traer la paz?
Por ahora debería quedar claro que Hamas está usando la cobertura de un convenio político para ganar legitimidad para sus objetivos extremistas. Después del establecimiento del gobierno de unidad, el ministro Fathi Hammad de Hamas declaró (y lo cito) que: “el silbido de las balas, el sonido de las bombas y de los cohetes que explotan… y la captura de soldados [israelíes]” era “música para nuestros oídos.”
El peligro o podía ser más claro. Al apoyar el convenio de unidad, se le está dando a Hamas la oportunidad de tramar incitación, violencia y terror en el tejido básico de Judea y Samaria, tal como lo hizo en Gaza.
Señor Presidente,
Los ciudadanos de Israel quieren vivir en paz. Queremos ver crecer y envejecer a nuestros hijos sin que tengan que correr hacia un refugio de bombas o ponerse un uniforme militar.
Espero que algún día podamos leer acerca de los ataques al pueblo judío en lo libros de historia en vez de en los diarios. Pero ese día no ha llegado todavía. Por ahora, nos vemos forzados a emprender una guerra contra un grupo terrorista comprometido con nuestra destrucción.
La noche ha caído sobre Israel. En lugar de dormir profundamente en sus camas, nuestros hijos y nuestras hijas están allí, en la oscuridad cubriendo guardia para proteger al pueblo de Israel. En el Libro de los Salmos, el Rey David dice [en Hebreo]:
He vivido demasiado entre quienes odian la paz.
Estoy por la paz: pero cuando hablo, ellos están en guerra.
Señor Presidente – A Israel no le queda otra opción. Pero cada uno de ustedes tiene una opción.
Fijen posición contra el terrorismo y apoyen el derecho de los pueblos de vivir en paz.
Fijen posición= contra el uso de escudos humanos y apoyen los derechos humanos
Fijen posición contra la opresión y a favor de las libertades que tanto queremos.
Los líderes de muchos países representados en esta sala ya han expresado su apoyo al derecho de Israel de defenderse. Les agradecemos por estar de nuestro lado en esta importante hora.
Pido al resto de ustedes que se les unan.
Tengo conmigo una brújula. Se la ofrezco a la comunidad internacional para que los guie hacia la toma de una decisión correcta. Apoyen la claridad moral, apoyen lo bueno contra lo malo, y apoyen lo correcto contra lo incorrecto.
Gracias.
Traducción: Carlos Armando Figueredo