El carácter innovador israelí ha despuntado en diversos ámbitos, pero quizá uno de los más productivos ha sido el sector de tecnología para la salud, desarrollando una serie de avances, medicamentos y dispositivos que ya están marcando pauta en la percepción de la medicina del futuro. En el tratamiento del cáncer de seno, Israel despliega un abanico de posibilidades tanto para la detección temprana como para la definitiva y tan anhelada erradicación de la enfermedad
Occidente se sumó en bloque a la lucha. Los lazos rosados invadieron desde centros de salud hasta casas de moda con un llamado en común: el cáncer de seno es el diagnóstico de este tipo, no cutáneo, que más frecuentemente reciben las mujeres al año —también miles de hombres—, y es posible revertirlo si se detecta precozmente.
De hecho, las tasas de supervivencia han mejorado en los últimos años, llegando a un 98% cuando se ataca la enfermedad a tiempo. Por eso, la continua invitación para hacerse el autoexamen mensual, así como la consulta ginecológica y la mamografía anual.
Según indicó la Organización Mundial de la Salud, Israel es uno de los países que tienen tasas más altas de cáncer de seno, ubicándose en la quinta posición en todo Occidente. Por su parte, la Asociación de Lucha contra el Cáncer y el Ministerio de Salud del Estado de Israel han informado que una de cada ocho mujeres judías que vive en el país sufre de cáncer de mama en algún momento de su vida. Estas estadísticas se atribuyen a que en los judíos asquenazíes (la mitad de la población judía de Israel) existen las mutaciones genéticas BRCA1 y BRCA2, que implican altas probabilidades de desencadenar el cáncer mamario.
Más de 4500 israelíes son diagnosticadas anualmente y cerca de 900 mueren por la enfermedad. Es por esto que el cáncer de seno se ha convertido en un asunto muy sensible para Israel, país que está estimulando intensamente la detección precoz, nuevas modalidades de tratamiento y una mayor conciencia en su población.
Como resultado, la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC) expuso una serie de estadísticas que ofrecen comparaciones entre los países con mayor incidencia y las tasas de mortalidad en el mundo. Estas arrojan que, a pesar de ser Israel una de las naciones que ocupa los cinco primeros puestos en incidencia de la enfermedad, en cuanto a los niveles de mortalidad se ubica en uno de los sitiales más bajos, mostrando además una tendencia continua hacia la reducción. Esto se explica por el rol que ha asumido como líder en la investigación y tratamiento de la enfermedad.
Made in Israel
La gama de desarrollos nacidos de mentes israelíes abarca diversos ámbitos para el tratamiento del cáncer mamario, con una clara aspiración a la obtención de la vacuna definitiva que elimine la aparición de la enfermedad. Algunos de estos son:
IceSense 3: Se trata de un dispositivo que está permitiendo a los médicos destruir tumores de mama benignos al congelarlos. Es un procedimiento mínimamente invasivo que ya se ha comenzado a probar en Estados Unidos. El proceso de crioablación toma entre 5 y 10 minutos en el consultorio, y se realiza con anestesia local. No requiere un período de recuperación pos-operatorio y no deja cicatrices en la paciente.
Ruth: Es una alternativa sin radiación y sin contacto con la mamografía, que creó el ingeniero Boaz Arnon. El inventor nombró el artefacto en honor a su madre, quien murió de cáncer de mama en 2004. Ruth permite una serie de análisis automáticos en 3D que arrojan señales infrarrojas emitidas de tejidos de mama cancerígenos y benignos. Una computadora interpreta los resultados con una precisión sin precedentes en pacientes de todas las edades: 90% en comparación con el 80% de la mamografía. Miles de mujeres han participado en los ensayos clínicos de Ruth desde 2007. El siguiente paso es la aprobación de la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) de Estados Unidos.
MarginProbe: Este sistema usa ondas electromagnéticas para identificar posibles tejidos cancerígenos en tiempo real. Con esto, se busca mejorar la cifra actual del 30% al 60% de mujeres que deben pasar por una segunda cirugía de cáncer de mama, porque en la primera no pudo deshacerse de todo el tejido canceroso en los márgenes del tumor.
Anticuerpos monoclonales: Es un “misil guiado” que ha sido licenciado por la Universidad Hebrea de Jerusalén, que comprende miles de moléculas de quimioterapia dentro de una nanopartícula de anticuerpos monoclonales. Su contenido no es liberado hasta que el “misil” alcanza el tejido cancerígeno.
Mejores biomarcadores: Livnat Jerbi, estudiante de doctorado de la Universidad de Tel Aviv, ganó una prestigiosa Beca Dan David 2012 por crear el primer estudio a escala del genoma para la progresión metabólica del cáncer de mama, un algoritmo que puede perfilar las características del tumor de cada paciente. Esto ayuda en el estudio de los mecanismos subyacentes de la enfermedad, clasificándola en función de su pronóstico y la identificación de potenciales biomarcadores metabólicos, como un medio no invasivo para el diagnóstico precoz y el seguimiento de la eficacia del tratamiento. Con esto, se definen cuáles son las drogas idóneas para que, a diferencia de los procedimientos convencionales, dañen solo al tumor y no a las células sanas.
El gen que suprime tumores: Desde hace tiempo se sabe que el gen p53 produce una proteína que puede suprimir tumores. En 2012, un equipo del Instituto de Investigación Médica Israel-Canadá de la Universidad Hebrea de Jerusalén descubrió que el p53 impide también que las células cancerosas invadan el tejido epitelial sano. La mayoría de los tipos de cáncer, incluyendo el de mama, se extiende a través de las células epiteliales. El objetivo a largo plazo es aumentar el control del p53 para impedir a los tumores la capacidad de propagarse.
Inmunoterapia: Dos vacunas terapéuticas contra el cáncer se están desarrollando en Israel. La Vaxil BioTherapeutics ‘ImMucin se puede adaptar al tratamiento de 90% de los cánceres mediante la activación y mejora del sistema inmunológico, para buscar y destruir las células cancerosas presentes en el cuerpo. El tratamiento no causa efectos secundarios, y se puede tomar de forma indefinida, como las vitaminas. ImMucin podría estar en el mercado en unos cinco años. Y la Vacciguard, tecnología para el desarrollo de vacunas contra el cáncer y una amplia gama de otras enfermedades para las que actualmente no hay tratamientos eficaces.
Bomba contra el cáncer: Los investigadores israelíes que están a cargo del proyecto informaron que han desarrollado una nueva técnica para combatir los tumores cancerígenos desde dentro del cuerpo, reduciendo el riesgo de que la enfermedad regrese después del tratamiento. Aseguran que, con un implante radiactivo del tamaño de un alfiler en el tejido involucrado, se obtiene una emisión de rayos alfa, de muy corto alcance, que circula dentro del tumor hacia el exterior, para luego desintegrarse. El procedimiento toma unos diez días y solo deja como secuelas pequeñas cantidades de plomo en el cuerpo, el cual no es radiactivo ni tóxico.
Octava: Una simple prueba de sangre permite detectar el cáncer de mama de manera sencilla y no invasiva. Ha sido validada mediante estudios clínicos llevados a cabo en los centros de cáncer en EEUU, Israel e Italia, donde se analizaron muestras de sangre de más de 800 mujeres. Todas tenían resultados positivos en sus mamografías, y sus patologías de cáncer de mama fueron verificadas por la biopsia. La prueba mide los anticuerpos específicos de cáncer producidos por el sistema inmunitario en respuesta al crecimiento de los tumores, y se puede utilizar tanto para diagnosticar rápidamente el cáncer de mama antes de que los tumores se vuelvan visibles en la mamografía, como para identificar los resultados falsos negativos y falsos positivos de las mamografías.
Adicionalmente, la Asociación de Cáncer de Israel ofrece al público general contacto las 24 horas a través de un servicio de tele-información, para responder cualquier pregunta sobre el cáncer de mama y otros tipos de cáncer, así como para recibir material informativo de forma gratuita.
Mamografía móvil: Israel ofrece a sus ciudadanos un servicio de mamografía que llega a los territorios más remotos a través de un vehículo especializado. De esta manera, es posible estimular en la población la realización de la prueba de detección, con la llegada de la mamografía móvil a los alrededores de su casa. Esta iniciativa ha sido posible gracias a la colaboración de todos los fondos de salud del país. Las mujeres en edades propicias para la realización del examen son invitadas a través de cartas personales, además de que se despliega en la localidad una serie de anuncios en los periódicos para publicitar la jornada.
Fuente: Nuevo Mundo Israelita