Dr. Benacerraf, Nobel nacido en Caracas en 1920

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Baruj Benacerraff, miembro de la Comunidad Judía venezolana, ganó el Premio Nobel en Medicina en 1980. Benacerraf sin duda, antes de llegar a Estocolmo caminó mucho mucho desde su Caracas natal para alcanzar, primero sus estudios de medicina en la Universidad de Columbia en Nueva York, y en la Universidad de Richmond (Virginia) y por último, como reconocimiento a su dedicación investigativa y talento el Premio Nobel 1980 en Medicina
Nació en Caracas, el 29 de Octubre de 1920. Fue el primer alumno extranjero aceptado en la Columbia University en 1942 (naturalizado estadounidense en 1943). Laureado con el Nobel de Medicina en 1980 por sus investigaciones en el campo de la inmunogenética. Hijo de padres judíos exiliados.
Baruj Benacerraf, patólogo que trabajó sobre los mecanismos de la respuesta inmunológica y su base genética, así como sobre sus efectos en la enfermedad autoinmune.
Por sus trabajos en este campo, en 1980 compartió con George Snell y Jean Daussett el Premio Nobel de Fisiología y Medicina.
Benacerraf nació en Caracas, Venezuela, pero su familia se trasladó a París cuando aún era un niño. Cuando estalló la guerra en 1939 se fue a vivir a los Estados Unidos, donde obtuvo la ciudadanía en 1943. Estudió en la Universidad de Columbia, donde se graduó en 1942, y en la Facultad de Medicina de Virginia, donde obtuvo el título en 1945. Sirvió en el Hospital General de Queens, Nueva York.
Tras un breve paso por el ejército estadounidense, Benacerraf inició un periodo de investigación y enseñanza, primero en Columbia y seguidamente en París, en el Hôpital Broussais. Tras su regreso a Estados Unidos, se incorporó a la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York en 1956 y en 1960 fue nombrado catedrático de Patología.
De 1968 a 1970 fue jefe del laboratorio de inmunología del Instituto para la Alergia y las Enfermedades Infecciosas, una división del Instituto Nacional de la Salud, y desde 1970 ocupa la cátedra Fabyan de Patología Comparada en la Universidad de Harvard.
Sin lugar a dudas que es Baruj Benacerraf un orgullo para la Comunidad Judía venezolana y también para toda Venezuela, porque aunque no haya desarrollado su vida y su carrera en este país, los vínculos de la familia Benacerraf son profundos con la tierra venezolana.
Los que han tenido la fortuna de conocerle, cuentan que posee una “memoria encantadora y a menudo chistosa” donde las anécdotas familiares y los recuerdos de su patria natal están muy presentes. Dr. Baruj Benacerraf, ejemplo de valores y metas cumplidas.
Fuente: Gentiuno

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