A continuación las palabras del presidente del Comité Venezolano de Sobrevivientes del Holocausto Yad VaShem, David Yisrael, en el acto conmemorativo de Kristallnacht 2013 realizado el 12 de noviembre en Bnai Brith de Venezuela.
Setenta y cinco años
Hace setenta y cinco años, el 9 de noviembre de 1938, empezó la matanza alemana contra los judíos en Alemania y Austria. Durante ese día y otro más quemaron 110 Sinagogas, decenas de colegios Judíos, destruyeron y quemaron centenares de negocios Judíos, mataron casi un centenar de inocentes y al final los judíos inauguraron los famosos campos de concentración de Dachau y Buchenwald, adonde se llevaron más que quinientos prisioneros, por la única culpabilidad de haber nacido Judíos, para que más adelante encarcelaran 30 mil hombres más.
Así empezó Hitler con el exterminio de los judíos europeos, cuya batalla ganó, efectivamente, al matar 6 millones, entre ellos un millón y medio de niños.
Nunca antes en la historia humana un pueblo contra otro usó cámaras de gas y crematorios como los S.S. y el GESTAPO implantaron en Polonia, los 6 famosos Campos de Exterminio con la maquinaria de Cámaras de Gas, hechas en Alemania con la supervisión de Hitler y Himmler.
Recordemos bien estos 6 nombres de estos Campos de Muerte son: Auschwitz, Chelmno, Majdanek, Sobibor, Treblinka y Belzek.
Estos sitios tienen que quedar grabados en la historia de la civilización para siempre, y que no sean olvidados jamás, junto con los nombres de los países que perpetraron este crimen por siempre.
Los colaboradores húngaros, ucranianos, lituanos y eslovacos llevaban a miles y miles en vagones para ganado, llenos con judíos de toda Europa, sin comida y lo peor sin agua día a día por toda Europa y nadie se levantó a protestar, y nadie ayudó a los heroicos jóvenes que se levantaron en los guetos, como aquellos del famoso Levantamiento era en Varsovia donde los Nazis lograron concertar 500.000 Judíos con hambre, tifus y frío y después quemaron la cuidad casa por casa, y así exterminó gran parte de los judíos polacos, que era la Comunidad más grande de Europa.
Mientras viva algún sobreviviente de la Shoá, tenemos la obligación de recordar, y gritar los nombres de estas maquinas de la muerte que los pusieran a trabajar día y noche para cumplir con la meta de la “Solución Final”.
Desde el Comité Venezolano del Yad Vashem, saludamos a nuestro orador del día de hoy, el doctor MARCEL ISRAEL, que gustosamente aceptó nuestra invitación casi como un deber frente a sus hermanos judíos, para acercarnos a la historia de un pueblo, el búlgaro, que no permitió que sus autoridades cedieran a las pretensiones de los nazis de ejecutar también, en su país la liquidación de los judíos que estaban allí desde hacia siglos.
Por otro lado, esta noche también les presentamos la última edición de la Revista –Zajor, que habla de héroes y salvadores, y villanos y traidores, con la esperanza de que después de que lo que hoy aquí hablamos, ustedes tengan un momento más de reflexión cuando lleguen a sus casas, y la compartan con sus hijos, y que sus hijos la compartan con sus amigos, en especial con aquellos que no han oído hablar del holocausto, para que el mensaje de que la Shoà no debe repetirse en ningún lugar y se eviten tragedias como las que nos pasó hace ya setenta y cinco años.
Siendo yo el Sobreviviente de Auschwitz, mayor que vive en Venezuela, me llevaron a Auschwitz, a los 15 años, me permito en dirigirme en especial a la juventud para que recuerden, y no olviden la Shoà es el crimen más horrendo que nación alguna cometió contra el otro, para evitar que se repita en algún otro lugar en el mundo.
Jóvenes, ¡recuerden! Estudiar la Historia de la Shoà. El futuro de esta amarga historia está en sus manos, no olvidar el Holocausto, recordemos el millón y medio de niños inocentes que fueron llevados bajo engaño con sus madres a ducharse y que en vez de agua, salió el gas asesino, que tomó entre 13 a 15 minutos hasta que estos niños dejaron de existir.
Dios recuerda estos inocentes mártires, que cada uno grito en el último momento el Shma-Israel”.
Dios ha de perdonar a estos asesinos cobardes y a sus colaboradores
Lo que han hecho al pueblo Judío en la Shoá. Sea la memoria de las madres e hijos, abuelos, tíos y tías, todas recordados por siempre que han dado sus vidas por haber nacido judíos y seguirán siendo judíos hasta la llegada de Mashíaj.