Por Emilio Baby
A 46 años de la Conferencia de Jartum o Khartoum donde los tres famosos “no” fueron dictados, hoy se negocian nuevamente los términos de la paz con los “palestinos”.
Fue por estos tiempos, fines de agosto, principios de setiembre del año 1967 donde se adoptaron, entre otras resoluciones los tres no: “no a la paz”, “no al reconocimiento”, “no a las negociaciones” en una conferencia llevada a cabo en Khartoum o Jartum, capital del Sudan. Todos los no, referidos a Israel. La conferencia fue convocada por la Liga Arabe como una consecuencia de la Guerra de los Seis Días.
Sin embargo no se puso ahí la piedra fundamental de la negación de la existencia del Estado de Israel. Dicha negación reconoce, a mi modo de ver, su partida de nacimiento en la inteligencia de los países árabes en destruir Israel como resultado de una ideología rancia imperante en la mentalidad de dirigentes árabes y no árabes de aquel entonces y desde aquel entonces.
Por un lado, la esperanza de la adhesión del desierto a los planes de destrucción, adhesión que se vio desmentida cuando el desierto empezó a florecer bajo la hegemonía y los cuidados israelíes. Por otro lado los países árabes, todos ellos monarquías absolutistas, en un operativo de pinzas, gigantesco y simultáneo no esperaban menos que la culminación del objetivo buscado, la destrucción de Israel.
Fundamentalmente la base formativa de la Conferencia fue el rechazo de Israel. Si bien otras resoluciones se tomaron, en la declaración final los tres “no” figuran como tercer punto de las resoluciones. El resto de las resoluciones no requería una conferencia de esa magnitud y podían ser resueltas por un medio menos espectacular.
Ocho jefes de Estado concurrieron en forma personal a la conferencia. También estuvo presente la OLP con la única finalidad de abogar por el no reconocimiento de Israel en el seno de las Naciones Unidas o sea la derogación de la Resolución 242 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Muchos historiadores están de acuerdo en que algunas negociaciones secretas se iniciaron contemporáneamente en el mismo seno de la conferencia, tendientes a negociar con Israel su existencia, su política en relación a las reclamaciones territoriales árabes y otras, pero nada de eso se llevó fructíferamente adelante.
¿Es Jartum un antecedente de las conversaciones actuales? ¿Es casual o ejemplarizadora la coincidencia de fechas?
Fuente: Aurora Digital